Empresarios de diversos giros comerciales han denunciado, a través de redes sociales y páginas de internet, presuntas prácticas de extorsión cometidas por personal vinculado a la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) en distintas regiones de la entidad.
De acuerdo con las versiones difundidas, restaurantes, farmacias, clínicas estéticas, maquiladoras y expendios de agua purificada serían objeto de cobros indebidos por parte de coordinadores, verificadores y supuestos colaboradores que, en algunos casos, no estarían oficialmente adscritos a la dependencia estatal.
Información extraoficial apunta a que en cada municipio existiría una persona encargada de recaudar dichos montos para entregarlos posteriormente a un grupo de coordinación central.

No obstante, hasta el momento no se ha presentado ninguna denuncia formal ante las autoridades ministeriales, pese a que las acusaciones podrían configurar un delito.
Aunque la procedencia de la información no ha podido confirmarse, el tema ha generado revuelo entre el sector empresarial y la opinión pública.
Actualmente, parte del personal de la Cofepris y de la Secretaría de Salud se encuentra en periodo vacacional, lo que ha retrasado la emisión de cualquier postura oficial.
Se ha señalado que cualquier aclaración o trámite relacionado con el caso debe realizarse directamente en las oficinas gubernamentales ubicadas en Ciudad Victoria, capital del estado.