Paisanos enfrentan desafíos por aumento en aranceles

Los paisanos que residen en Estados Unidos y suelen viajar a México para las fiestas decembrinas enfrentan un nuevo obstáculo este año: el impacto económico de los aranceles impuestos a productos mexicanos por el presidente electo Donald Trump. Esta medida ha comenzado a encarecer bienes básicos, generando preocupación entre las familias mexicanas en ambos lados de la frontera.

Oscar García, quien vive en el Valle de Texas, expresa cómo este cambio afecta su economía. “Entrando el año todo se dispara para arriba, todos los artículos. Comía dos veces carne por semana, y ahora voy a tener que comer un día por semana”, relata.

El Valle de Texas, una región con alta concentración de mexicanos originarios de Tamaulipas, Nuevo León y otros estados del país, podría experimentar un fuerte impacto, ya que muchos de los alimentos consumidos en esta área son importados desde México. La residente Hilda resume el sentir de la comunidad: “Ellos también van a aumentar los productos que nos vienen, ¿y quién va a pagar la diferencia? Pues nosotros”.

Desde una perspectiva comercial, el efecto cascada de los aranceles también preocupa a los distribuidores. Mario García, manager de una central de abastos en McAllen, explica: “En los supermercados consumen producto mexicano, entonces, ¿qué va a pasar con el precio desde México hasta acá, hasta las manos del consumidor? Todo es una reacción en cadena”.

Por su parte, el sector empresarial en la frontera de Tamaulipas también enfrenta incertidumbre. Roberto Cruz, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CANACO), señala que las empresas manufactureras podrían verse especialmente afectadas. “Muchas de ellas son de Estados Unidos que manufacturan o ensamblan en nuestro país. También van a tener una afectación al tener un costo adicional”, advierte.

Este escenario no solo amenaza la estabilidad económica de las comunidades en México y el sur de Estados Unidos, sino también las tradiciones decembrinas de miles de paisanos, quienes podrían ver reducida su capacidad para enviar remesas, adquirir regalos o disfrutar de los tradicionales platillos de temporada debido al encarecimiento de los productos.

El incremento en los aranceles impone un desafío adicional a los paisanos, quienes ya enfrentan las dificultades de vivir lejos de sus familias y raíces. Ahora, el aumento en los costos representa una barrera más que podría alterar su modo de vida y los lazos que mantienen con su país de origen.