Un fin de semana largo bastó para exponer de nuevo las carencias operativas en el sistema de aduanas de la frontera de Reynosa. Las familias del noreste de México que visitaron el Valle de Texas enfrentaron filas de hasta cuatro horas para regresar al país, lo que generó una ola de inconformidad entre los automovilistas.
Las quejas llegaron al Congreso de Tamaulipas, donde los diputados recibieron reportes de lo ocurrido y comenzaron a preparar una postura oficial.
El presidente de la Junta de Coordinación Política, Humberto Prieto Herrera, adelantó que el tema será llevado esta misma semana a la máxima tribuna federal para exigir una solución urgente.
Señaló que buscarán solicitar a las autoridades aduanales la asignación de más personal y la apertura de los carriles actualmente cerrados, al considerar que estas medidas permitirían agilizar el retorno de los viajeros.

“Esta misma semana estaremos presentando y solicitando a la aduana que considere poner más personal o que se abran ya los carriles que tienen cerrados, para tratar de que el flujo sea más rápido, pero sí tenemos información de lo que sucedió sobre todo el día de ayer y tomaremos cartas en el asunto”, expresó.
En el punto de revisión, la aduana opera prácticamente como un búnker bajo control de la Guardia Nacional. De acuerdo con los reportes, los sistemas electrónicos permanecen apagados como parte de la estrategia aplicada en la zona, lo que limita la capacidad de revisión y retarda el cruce.
Además, el ingreso vehicular se reduce a un solo carril, mientras que los demás permanecen bloqueados con diversos objetos, incluidos “poncha llantas”.
Esto ha dejado sin utilidad la millonaria inversión destinada a la modernización del cruce, ya que los equipos nunca han sido puestos en funcionamiento.
Prieto Herrera confirmó haber observado personalmente parte de la infraestructura instalada, como los aparatos de rayos X que permanecen sin uso.

“En lo personal sí vi que ya estaban los aparatos, no te sabría decir qué son, pero según lo que vi ya están listos los rayos equis. Entonces sí me llamó la atención. En ese momento no había tanta fila, sin embargo después se congestiona mucho y es un tema en el que debemos de tomar cartas en el asunto,” comentó.
Antes de que inicien las festividades del Día de Acción de Gracias y las celebraciones decembrinas —periodos en los que aumenta el flujo fronterizo—, el Congreso de Tamaulipas prevé presentar la problemática al gobierno federal. Los legisladores argumentarán que la operación actual afecta directamente al turismo, a las compras transfronterizas y a la proveeduría de productos y servicios en ambos lados de la frontera.
El diputado reiteró la necesidad de atender la situación con sensibilidad hacia los ciudadanos que cruzan diariamente. “Tener empatía con toda la gente que va y viene, sobre todo que hay mucha gente que va y viene todos los días.
Entonces perder una o dos horas en el regreso… a lo mejor no tenemos tanta influencia en el lado de Estados Unidos; sin embargo, en el regreso, que es la aduana, sí tiene que ser más fluido el tema del cruce,” señaló.
