En incertidumbre y con temor de las próximas lluvias se encuentran los habitantes de las más de 30 viviendas que resultaron con daños colaterales -entre ellos colapsos de muros-, tras la explosión de un domicilio en Escobedo.
Y es que todavía no pueden retirar los escombros que el accidente dejó, por lo que algunas casas quedaron con cuartos prácticamente a la intemperie y sin posibilidad de colocar alguna protección.
Ahí vienen las lluvias, y como estamos ahorita sí está muy peligroso, más porque no nos dejaron limpiar nada, tenemos todo lleno de material y vidrios.
Vienen unas personas y les preguntamos, pero nos dicen que no, que van a venir otras personas, y así nos tienen, lamentó Ricardo Rico.
Algunos vecinos ahora deben pasar la noche en el porche de sus casas debido a que sus habitaciones quedaron destruidas tras el accidente.
Con mayores afectaciones resultaron quienes habitan a espaldas de la vivienda que explotó, pues además de derribarse muros, también aparecieron cuarteaduras y grietas.
No sé si mi casa sea habitable, estoy arriesgando a mi familia al tenerla aquí, porque tampoco los puedo tener en el Sol porque está muy fuerte.
Necesito sacar todo el escombro, que me digan qué voy a hacer, si me puedo quedar aquí o ya no puedo volver, exigió Claudia Martínez.
Los afectados pidieron tanto a Protección Civil de Nuevo León, como a la Fiscalía General de Justicia, que aceleren las indagatorias para que se puedan comenzar con la reconstrucción de sus viviendas antes de las lluvias.