Pese a la salida de la segunda ola de calor, Nuevo León mantendrá la posibilidad de alcanzar temperaturas por encima de los 45° grados.
Este fenómeno es conocido como advección de aire cálido, lo que significa que las corrientes de viento caliente se mantienen en un punto fijo de la superficie terrestre atrapado entre las bajas temperaturas de su alrededor.
En cuanto a la temperatura, la entidad mantendrá un margen de máxima de entre 40 a 45 grados, esto los próximos días hasta culminar la semana el viernes 17 de mayo, de acuerdo con el Sistema Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).
Aunado a los altos niveles de temperatura, se estima que podrían producirse torbellinos o tornados al tener rachas de viento de 50 a 70 kilómetros por hora y tolvaneras en Nuevo León, al menos hasta el día jueves 16 de mayo, donde bajará la velocidad hasta 10 kilómetros por hora.
Para este mismo día y el miércoles, un sistema frontal se extenderá sobre el noreste del país e interactuará con una línea seca y con la corriente en chorro subtropical, ocasionando rachas fuertes a muy fuertes de viento sobre el estado.
Asimismo, provocará fuertes chubascos y lluvias puntuales fuertes y para el viernes se espera que el sistema frontal salga del territorio nacional, dejando entrar un nuevo frente frío que mantendrá altas posibilidades de precipitación.
En el mapeo que presentó la Conagua se puede ver cómo los tres fenómenos climáticos interactúan en la zona noreste del país, provocando las distintas condiciones de calor, lluvia y fuertes vientos en Nuevo León.
Ante la posible llegada de fuertes lluvias de entre 25 a 50 milímetros de agua, la instancia federal advirtió de la posible afectación en los niveles de ríos y arroyos en la entidad, por lo que se recomienda mantener un monitoreo constante para evitar alguna afectación a los ciudadanos.