En la fiesta guadalupana no pueden faltar los sabores, y ésos son los que tienen que ver con los churros, el champurrado y los buñuelos.
Los fieles católicos que desde temprano acuden a visitar el Santuario de la Virgen Morena, en la colonia Independencia, en Monterrey, invariablemente son parte de esta tradición.
Tras escuchar la misa o participar en una peregrinación y recibir la bendición, acuden a los negocios que se ubican enfrente de la Basílica para una probadita del sabor.
Los tradicionales churros no pueden faltar, y los hay bañados en azúcar o rellenos de cajeta y otras delicias.
En el entorno de las calles Jalisco y Libertad, la tradición de lo dulce sigue viva.