A dos días de la marcha con motivo del 8M, distintos establecimientos, locales comerciales y estaciones del metro en el perímetro de la Macroplaza han sido cubiertos con tablas de madera.
Las estaciones del metro General Zaragoza y Padre Mier ya lucen cubiertas con tablones colocados por trabajadores de Metrorrey, quienes han utilizado herramientas como taladros y martillos para fijar las estructuras.
Negocios ubicados sobre la avenida Zaragoza, en la intersección con Padre Mier, también han tomado precauciones, cubriendo ventanas y paredes con madera, además de otros ubicados al lado del Palacio Municipal de Gobierno.
Algunas de estas protecciones muestran consignas y frases de marchas feministas anteriores, evidencia de su reutilización en otras movilizaciones.
El blindaje de inmuebles previo al 8M se ha vuelto una práctica recurrente en la ciudad, mientras los colectivos feministas se preparan para salir a las calles a exigir justicia, igualdad y el cese de la violencia de género.
