El titular de Seguridad, Gerardo Palacios Pámanes, expresó que tras el feminicidio de una uniformada de Fuerza Civil, los protocolos para protegerlas deben ser modificados y reforzados.
Como ya se sabía, la expareja de esta mujer, que también era elemento activo de la cooperación, contaba con órdenes de restricción; sin embargo, ahora los protocolos deben marcar más distancia.
Pámanes expresó que la orden siempre estuvo activa e, incluso, la protegía mientras estaba acuartelada y la policía municipal de García, municipio donde se encontraba al momento de los hechos, tenía injerencia para hacer cumplir la restricción.
Respecto al sospechoso, refirió que de manera voluntaria se presentó ante la Fiscalía cuando se le solicitó.
Expuso que el martes, de manera privada, se llevó a cabo una guardia de honor y el presunto está bajo prisión preventiva en un centro penitenciario y no se ha comprobado que sea el arma de cargo con la que se perpetró el asesinato.