VIE 14 FEB
30°

Nuevo León

Menor con malformación arterial relata el calvario que sufre

Por: Brian Jiménez

06 Mayo 2023, 18:30

Compartir

Amaya Carolina de 10 años padece una malformación arterial que le generó un tumor en la parte derecha de su cuello provocándole un dolor permanente.

En el marco del festejo del día del niño realizado por la organización, Doctor Sonrisas, que tiene como objetivo brindar acompañamiento a niños con enfermedades que ponen en riesgo su vida, INFO7 tuvo la oportunidad de platicar con Amaya Carolina de 10 años y padece una malformación arterial.

Ella nos compartió lo complejo que es su día a día con este padecimiento.

“Cuando estaba pequeña, yo veía que también niños pequeños de mi edad; corría, iban en bici, o iban haciendo actividad física y yo no podía hacerlo y yo quería hacerlo y yo me sentía triste porque yo no lo podía hacer”

Esto debido a que su malformación generó un tumor en la parte derecha de su cuello, por lo que esa parte y su cara son intocables, porque podrían poner en riesgo aún más su vida. Y ciertamente ha vivido un calvario desde su nacimiento, debido a que su único tratamiento, es aquel que aminore el dolor en su cuello, no hay forma de que este se vaya por completo.

“Usualmente cuando me duele, tomo Paracetamol o algo así para que se me baje tantito el dolor.“

De repente dejo de sentir dolor, o sea, ya me acostumbre, ya es como que no siento nada pero hay veces que si siento punzadas muy fuertes

”Asegura que su más grande sueño es ser doctora para ayudar a todas las personas en malas condiciones de salud. Y sobre aquellas personas que no disfrutan al máximo sus actividades diaria, la menor relató una experiencia que vivió con su hermana.

“Me dijo yo también quisiera tener un tumor o estar enferma de influenza para no ir a la escuela y le dije; no sabes lo que quieres, porque si se siente muy feo el ver y no poder hacer las cosas que niños de tu edad hacen si se siente feo y te dan ganas de llorar, porque cuando yo estaba más pequeña, yo veía que mis compañeros salían a educación física y yo me agarraba a llorar”

Como Amaya, miles de niños en el mundo atraviesa situaciones de salud que los limitan a vivir con normalidad, ahora se ha incorporado a la normalidad, sin embargo el día a día para ella, se traduce en dolor.

Comentarios