Guadalupe ingresó a su hijo a una clínica de rehabilitación para adicciones llamada Esperanza y Luz de Vida, en donde ha reportado que el joven de 17 años recibe malos tratos y no recibe una buena alimentación.
La comida que les están dando ahí es comida que no es saludable, o sea, es comida que se las tienen que dar a fuerzas, almuerzo, comida y cena.
Ellos le llaman que el caldo de oso no se que sea, es un caldo con verduras que ni a nada y que se lo tienen que comer, se lo tienen que comer en la mañana, en la tarde y en la noche los levantan bien temprano a las 05:00. Bañarse con agua fría, no los dejan ni bañarse bien nada más.
Se meten como quien se remoja, ni se salen porque ya los están presionando para que se salgan. Los meten a bañar entre varios, no se bañan de uno. Esta y pues aquí la molestia es de que son mentiras, o sea, un no trabajando para que no les falte a ellos porque nos piden básicos. Los básicos son estos, aparte de lo que uno paga por semana.
Guadalupe declara que en el Centro de Rehabilitación Esperanza y Luz de Vida su hijo es castigado cruelmente por los trabajadores del lugar
Los dejan parados viendo hacia la pared y no deben de hacer movimientos, de pararse cualquiera, de que se recarga en un pie o en otro, no es el que lo llaman mucho, así que aplicarlos así le llaman ellos. Hay que aplicarse, o sea, ¿te aplican y te aprietan, no? Y pues eso no está bien.
El Centro de Rehabilitación Esperanza y luz de vida se ubica en la calle Profesor Celso Flores Zamora #204 en la colonia La Victoria en el municipio de Guadalupe.
Las mujeres que están en el mismo centro también reciben malos tratos.
Y a las muchachas también les están dando muy malos tratos, le dan muy malos tratos a las muchachas. Las muchachas andan con sus pies hinchados donde las tienen paradas, allá las dejan paradas hasta 12 horas. A las muchachas las tienen paradas hasta 12 horas, no las dejan tomar agua en ese lapso de todo el tiempo, no las dejan tomar agua y a ellas las castigan en la noche, todas las noches paradas, o sea, todas se van a dormir.
Para poder sacar al menor, la clínica le pide una cantidad de 40 mil pesos
Este y yo ahorita, mi hijo está ya dentro de lo que quiero es sacar a mi hijo porque las personas que están ahí encargadas me dicen que yo no lo puedo sacar, que yo tengo que pagar una deuda de casi 40.000 $, porque viene siendo lo que es este, el contrato de seis meses y que, mientras yo no lo puedo sacar, que simulo y si así me lo entregan, pero yo tengo que pagar esa cantidad y la verdad, yo no tengo dinero para sacar a mi hijo, no tengo para cubrir esa cantidad.
La madre del joven confió en el Centro de Rehabilitación Esperanza y luz de vida porque buscaba el bienestar de su hijo, hoy con el alma rota y desesperada pide que le ayuden a sacar a su hijo de ese lugar.
El domingo apenas me vio, hoy se le partió el alma, me abrazó y me dijo que íbamos a portar bien y yo llego a hacer caso entonces este. Por eso ando pidiendo ayuda, porque me ayude, no sé, a cambio.
Pues que me ayude, que me ayuden a sacar a mi hijo, que me ayuden, por favor, porque yo no tengo dinero para sacarlo, mi hijo es menor de edad y, pues, yo quiero sacarlo de ahí. Yo no quiero que mi hijo esté ahí, yo no quiero que mi hijo esté ahí, porque la verdad, el domingo se me partió él.