Usted lo sabe y en estos calorones infernales está más que comprobado que necesitamos de los árboles para mitigar las altas temperaturas.
Este tema ha sido desatendido o relegado por los ciudadanos, gobiernos y las empresas. Hacen falta más áreas verdes en la metrópoli.
Donde no hay árboles la temperatura puede llegar hasta 48 grados en la superficies y donde sí hay el termómetro es de 33 grados o menos.
El experto en temas de ecología, Antonio Hernández, lo ejemplificó con dos casos particulares como lo son las áreas industriales en contraste con el Parque Fundidora.
También mencionó el caso de San Pedro, que es uno de los municipios más arbolados, donde se siente menor temperatura que en Monterrey y otros municipios.
El especialista consideró que se han privilegiado algunas cuestiones de bienestar por encima del cuidado a la naturaleza y lamentó dos circunstancias: una, que haya quienes se nieguen a sembrar árboles por considerar erróneamente que las hojas que caen son basura, y dos, que los gobiernos sigan con el rezago histórico de habilitación de áreas verdes.
El mensaje a las nuevas generaciones es que siembren árboles nativos de la región que puedan adaptarse a la condiciones extremas del clima, pero se les pide esperar a que pase esta ola de calor para hacerlo, pues por el momento no es temporada.