Barrio Antiguo: un lugar de mitos, leyendas y fantasmas
INFO7 - En pleno corazón de Monterrey, se localiza Barrio Antiguo. Una zona que recupera el pasado de la ciudad.Pero también un lugar de leyendas, mitos y fantasmas.En la calle Morelos, hay casas, algunas con más de 200 años de antigüedad, que ahora lucen rehabilitadas.En estas viejas construcciones, de numerosos cuartos, gruesos muros y grandes patios, habitan extrañas historias en la que no cabe la lógica, relatos que ponen los pelos de punta a quienes las viven o escuchan.Como la leyenda del Regreso del Senador."Cuenta la leyenda que en esta antigua casona residía un senador que hacía constantes viajes, en uno de los cuales le sorprendió la muerte. Sin embargo, platican los vecinos que en las noches de invierno, cuando está más oscuro, llega el senador a su casa, ya que se escuchan los cascos de los caballos, el rodar del carruaje que se detiene en la casa y los pasos de alguien que entra en ella", es lo que está escrito en una placa de una propiedad en la calle Morelos y Mina.En estas casas, hay placas que afirman que en estos hechos participan fantasmas, espíritus y ánimas en pena.Como la Leyenda del Obispo Fantasma que pago una deuda, la del Señor Mora y la Dama Misteriosa o la de los Artistas y los Espíritus Chocarreros, entre otras.Así como la Leyenda del Anillo de Compromiso."Era Beatriz una de las muchachas más bellas del barrio. Eugenio, su prometido, recién le había entregado en señal de compromiso un hermoso anillo de oro dos relucientes brillantes. Un domingo como tantos, Beatriz salió a dar un paseo en lancha por las aguas de Santa Lucía, ensimismada, pensando en Eugenio, hundía su blanca mano en las cristalinas aguas del río, y no advirtió que la humedad adelgazó sus dedos y el anillo fue a dar el fondo, al darse cuenta lo busco desesperadamente, pero no lo encontró. Algunos meses atrás, en otra embarcación llena de muchachos, iba Esteban que desde hacía tiempo cortejaba a Beatriz sin éxito, al darse cuenta del desprendimiento del anillo, hábilmente logro rescatarlo sin que nadie lo advirtiera. Urdio entonces su venganza. Hablo con Eugenio diciéndole que Beatriz despreció su anillo arrojándolo al agua y que tenía planeado casarse con él, entonces Eugenio cegado por los celos ahogó a Beatriz en el río y se asegura que desde entonces en las noches de luna llena se le ve caminar sin hundirse en las cristalinas aguas llamando a Eugenio y buscando inconsolable su anillo".Ahora, estas leyendas reviven en la memoria de las personas que caminan todos los días por las calles de Barrio Antiguo.
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