Tiene Tula la prioridad para nueva refinería

En conferencia, el funcionario precisó que "Tula es la alternativa de mayor rentabilidad", y en donde la inversión a realizarse es por nueve mil 123 millones de dólares, más tres mil 76 millones de dólares adicionales para la reconfiguración de la refinería de Salamanca. De ahí que la inversión total sumaría 12 mil 199 millones de dólares, tomando en cuenta que la refinería quedará en Tula y se hiciera la reconfiguración del complejo Antonio M. Amor de Salamanca, dijo. Destacó la importancia de que Pemex tenga un área adecuada para la construcción de la nueva refinería, por ello la contracción del complejo "queda sujeta a que la paraestatal cuente con los terrenos de 700 hectáreas para el nuevo tren de refinación en Tula". "En otras palabras, la construcción del paquete mencionado se materializará siempre y cuando se concluya la donación a Pemex de los terrenos necesarios durante los 100 días naturales subsecuentes a este anuncio". Asimismo, la entidad deberá entregar a Pemex Refinación una constancia de manifestación unilateral e irrevocable de transmitir en donación al organismo dichos bienes o terrenos. Si al término de este plazo Hidalgo no entrega los terrenos y Guanajuato si pudiese cumplir con dicha condición los 10 días naturales inmediatos posteriores, entonces la ampliación de capacidad de refinación se realizará en Salamanca y la reconfiguración sería en la refinería Miguel Hidalgo, en Tula, precisó. Reyes Heroles comentó que las razones para elegir Tula es por la cercanía a la demanda futura de petrolíferos, su infraestructura previa, condiciones climatológicas aceptables, aprovechamiento de residuales, así como un proyecto acorde con lo que demanda el Sistema Nacional de Refinación. A partir de este momento, dijo, la paraestatal iniciará los estudios y proyectos técnicos en la sede ganadora para que en 2011 se realicen las licitaciones correspondientes, con un proceso de construcción de 50 meses, mientras que la reconfiguarción en Salamanca entraría en 2014 y el aprovechamiento residual en 2015. Señaló que el país requiere aumentar su capacidad de refinación en 600 mil barriles de crudo, pero con la nueva refinería se dará un incremento de 300 mil. No obstante, aseguró que con esta capacidad se reducirían las importaciones a 15 por ciento de la demanda de gasolinas y se exportaría 10 por ciento de diesel y turbosina para 2015, cuando entre en operación el nuevo complejo. Respecto a los recursos de la inversión, el funcionario dijo que Tula aportaría alrededor de mil 800 millones de dólares incluyendo los terrenos e infraestructura, y el resto Pemex una parte con recursos propios y otra a través de emisión de deuda. "Esta es una decisión muy importante, estratégica para Pemex, pero también es una decisión muy importante para el país, porque todos salimos ganando con la refinería", porque después de muchos lustros se atenderá el déficit en gasolinas y se evitará seguir mandando empleos fuera del país, manifestó. Además, insistió, "va a tener un impacto directo e inmediato sobre la economía y yo confío plenamente en que esto se ha hecho con todo entendimiento, con cuidado, con criterios técnicos y económicos y así queremos concluir este proceso, que se construya la nueva capacidad y que podamos avanzar para modernizar el Sistema Nacional de Refinación".

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