Avalan en Senado reforma constitucional en sector energético

El Senado de la República aprobó este lunes la reforma constitucional en materia de áreas estratégicas y empresas públicas del Estado, con el objetivo de reforzar el control estatal en el sector energético.

Tras un intenso debate de casi cinco horas en las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales, Energía y Estudios Legislativos, la minuta enviada por la Cámara de Diputados fue avalada con 29 votos a favor y 10 en contra.

La reforma, que modifica los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), busca revertir los efectos de la reforma energética impulsada en 2013 por el expresidente Enrique Peña Nieto, al dar prioridad al Estado en la industria eléctrica y otros sectores estratégicos.

El objetivo principal es garantizar el suministro de electricidad al menor costo posible y con un enfoque social que beneficie a toda la población.

Cambios clave en la reforma

Uno de los puntos más relevantes de la reforma es la eliminación del concepto de “empresas productivas del Estado” en el texto constitucional, que ahora será reemplazado por el de “empresas públicas del Estado”.

Esto implica que entidades como la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) estarán enfocadas en cumplir con una responsabilidad social más que en generar ganancias.

Óscar Cantón Zetina, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, destacó que la reforma reivindica el patrimonio del pueblo mexicano, al asegurar que los recursos energéticos naturales, como el petróleo y la electricidad, beneficien directamente a la población.

Cantón afirmó que el Estado debe tener un rol central en la administración de estos recursos para garantizar su accesibilidad y sostenibilidad.

Por su parte, Laura Itzel Castillo Juárez, presidenta de la Comisión de Energía, subrayó que la reforma también se enfoca en sectores estratégicos como el acceso a Internet y la explotación del litio, lo que permitirá que las comunidades más vulnerables puedan beneficiarse de estos servicios esenciales.

Posturas a favor y en contra

Desde Morena, Beatriz Mojica Morga argumentó que la reforma ayudará a "poner fin a los saqueos" en la industria eléctrica y facilitará la conexión a Internet en zonas rurales e indígenas.

Mojica destacó que, bajo este nuevo marco legal, las empresas públicas estarán mejor posicionadas para garantizar el servicio en áreas apartadas del país.

Sin embargo, la reforma no fue exenta de críticas. Agustín Dorantes Lámbarri, del Partido Acción Nacional (PAN), advirtió que la iniciativa no aborda los problemas financieros crónicos de Pemex y la CFE, lo que podría llevar a pérdidas millonarias para el Estado. Dorantes también señaló que el Estado debería ser más eficiente en el manejo de estos sectores antes de expandir su control.

Por su parte, Luis Donaldo Colosio Riojas, del partido Movimiento Ciudadano, opinó que México debe apostar por la generación de energías limpias y sostenibles, y permitir la competencia en el sector para que los servicios sean más económicos y ecológicos.

Colosio argumentó que un monopolio estatal en el sector energético podría frenar el desarrollo de tecnologías renovables.

⚡️COLOSIO ADVIERTE🚨 Luis Donaldo Colosio alerta que la regresión en el modelo de política energética lleva a México hacia un escenario ya fracasado. 🛑 Anuncia que @MovCiudadanoMX votará en contra de la reforma que busca regresar al país al modelo de protección de empresas… pic.twitter.com/Dnr0FCx49n

— LuisCardenasMX (@LuisCardenasMx) October 15, 2024

Un paso hacia la soberanía energética

Finalmente, Alejandro González Yáñez, del Partido del Trabajo (PT), afirmó que la reforma permitirá que la CFE y Pemex se consoliden como empresas que garanticen el suministro energético a nivel nacional.

González Yáñez insistió en que la soberanía energética es clave para el desarrollo de México y que el Estado debe ser el principal actor en la administración de estos recursos.

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