Universitaria descubre que compañero de piso los espiaba con iPhone escondido en el baño
INGLATERRA.- Gran sorpresa se llevó una estudiante de la Universidad de Lincoln, Inglaterra, cuando descubrió que un compañero de casa la había estado grabando en secreto cuando iba al baño con un iPhone escondido dentro de una caja de metal.Aubrey, que no es su nombre real, contó que quedó horrorizada al descubrir el celular que estaba escondido en una caja de metal en el baño de la casa que comparte con otros 14 estudiantesLa chica dijo que había comenzado a sospechar luego de que notara que el contenedor tenía un pequeño agujero en la esquina.“Había una caja roja con cerradura colocada en el baño desde el día en que nos mudamos juntos al departamento. Todos asumieron que tenía objetos y no pensaron en ello, pero siempre sospeché porque tenía un pequeño agujero hecho por alguien a un lado de la caja. Cada vez que iba al baño, siempre lo volvía contra la pared, pero otra persona pronto lo volvía a poner en la posición original", declaró a The Lincoln Tab.DÍA QUE ENCONTRARON EL IPHONE EN LA CAJAAubrey que cierto día fue al baño y noto que la caja había sido trasladada ahí."Pensé 'eso es extraño', pero lo recogí y lo moví de regreso. Entré en la habitación de mi amiga. Le pregunté si pensaba que la caja era sospechosa."Dijo que cuando lo recogió antes de que algo se sacudiera dentro. Hablamos sobre eso y nos preguntamos qué podría haber dentro".Se preguntaron si podría haber una cámara allí, pero lo descartaron porque se sentía ridículo.Más tarde, su amiga va al baño, regresa y le comenta que la caja había sido trasladada nuevamente al baño.Fue entonces que realmente comenzaron a sospechar y a preguntarse '¿qué está pasando aquí?'."Fue realmente aterrador. En ese momento, no sabíamos quién era ", contó."Mi amiga me dijo que si entras en una habitación con la luz apagada y apuntas una luz de flash a la lente de la cámara, se reflejará en ti. Entonces lo intentamos. Esto es cuando se puso aterrador, porque había una luz reflejada parpadeando cuando lo hicimos. Había una cámara dentro de allí", agregó.Inmediatamente llevaron la caja a una habitación y grabaron el momento en que la abrían. Dentro encontraron un iPhone, así como un acrílico que decía 'Keep Calm I'm A Student', que se había utilizado para sostener el móvil y pegarlo en la tapa de la caja.Aubrey dijo: 'No sabía si esto era algún tipo de broma. ENFRENTAMIENTO CON EL PERVERTIDOEn ese momento, alguien del chat grupal de la casa preguntó dónde había ido la cajita roja del baño. Dijo que la caja tenía su cepillo y pasta de dientes.Aubrey le dijo a The Tab: “En este punto, sabíamos que era suyo y que estaba mintiendo, así que pusimos en el chat que habíamos abierto la caja y encontramos un teléfono allí.El sujeto que reclamó la caja trató de cambiar la historia y dijo que puso su teléfono allí para amplificar su música para cuando estaba en la ducha.Esta noche, Aubrey se encerró en su habitación con la caja y el teléfono. El compañero de piso le bombardeó con mensajes pidiéndole que se lo regresara, incluso dijo que denunciaría a la policía el robo de su celular. Aubrey le pidió el código de acceso del móvil para comprobar que no había estado espiando, pero se negó bajo el argumento de que había fotos privadas de su novia.Al día siguiente, luego de ser aconsejada por la Unión de Estudiantes, fue a la policía denunciaron que el compañero de piso había cometido voyeurismo. Aubrey afirma que su compañero nunca regresó a la propiedad después de que que la policía se lo llevó para interrogarlo y no lo ha visto desde entonces.Las autoridades después le llamaron a la chica y le comentaron que voluntariamente desbloqueó el teléfono y encontraron un video.'Era un video de mí y otros dos compañeros de casa yendo al baño. La cámara vio todo y fue muy vergonzoso. Fue absolutamente horrible", expresó.'PARECÍA BASTANTE DECENTE' La afectada comenta que realmente no lo conocía tan bien. "Pasaba mucho tiempo arriba jugando videojuegos con sus amigos. Realmente no interactué mucho con él", dijo.'Parecía bastante decente, nunca tuve ningún problema con él. Creo que eso es lo más impactante porque simplemente no lo esperabas".SENTENCIAUn mes después, el compañero de casa se declaró culpable en el tribunal y recibió una sentencia de seis meses de prisión, suspendida por dos años.Además se le hizo firmar el Registro de delincuentes sexuales por más de cinco años, pero se le permitió continuar sus estudios en Lincoln de forma remota y fuera del campus.
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