Piden a votantes latinos `castigar` al Partido Republicano

"Hay un descontento pero hay que ver el por qué, si regañas a todos o al que se porta mal", dijo Menéndez con referencia a la frustración de los votantes por la falta de acuerdos bipartidistas para resolver los asuntos urgentes que afronta el país. "En este caso cuando los republicanos usan todos sus derechos en el Senado para impedir el progreso en el tema de la economía, en el tema del trabajo, en dar alivio a los que están perdiendo casa, en inmigración, es injusto pintar a todos con la misma brocha", agregó. El senador formuló sus declaraciones a Notimex luego de una conferencia de prensa con medios hispanos convocada por varios senadores estadunidenses para abordar diferentes asuntos. Menéndez afirmó que los padres fundadores de la patria indicaron que las decisiones políticas se deben tomar por medio de un Congreso en el que tiene derechos tanto la mayoría como la minoría. "La diferencia es que hay que castigar cuando esos derechos se mal usan en una democracia", puntualizó. El senador criticó el obstruccionismo de los republicanos en el Senado, que obliga a los demócratas a conseguir una súper mayoría de 60 votos para aprobar cualquier legislación o ratificar una nominación. Señaló que el presidente Barack Obama "no es un rey" y que solamente puede usar la opinión pública para buscar la acción del Congreso, tomando en cuenta que los republicanos controlan la Cámara de Representantes. Los demócratas están proponiendo soluciones a los temas de inmigración, alivios tributarios y los embargos hipotecarios, pero no cuentan con los suficientes votos para su aprobación, lamentó. Durante la conferencia, el senador demócrata Charles Schumer, señaló que existen conversaciones bipartidistas para revivir una reforma migratoria integral o el proyecto de ley Dream Act para legalizar a jóvenes indocumentados, pero evitó dar más detalles. Los demócratas, que controlan el Senado, enfrentan críticas de grupos latinos por el elevado desempleo del 11.3 por ciento, superior al promedio general del 8.6 por ciento, y el número récord de deportaciones durante el gobierno de Barack Obama.

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