En un dramático suceso en el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro, en España, los presentes se vieron sorprendidos por la llegada de una mujer con claros signos de violencia. La víctima, llevando una cadena con candado alrededor de su lastimado cuello, relató haber sido secuestrada por un individuo que previamente conocía superficialmente.
La mujer, tras escapar del hombre que la había secuestrado, reveló que este individuo, bajo la excusa de darle un aventón al hospital donde ella cuidaba a una amiga, la agredió brutalmente.
El secuestro se desencadenó cuando, una vez dentro del vehículo, el agresor, de 57 años, la convenció de pasar por su casa antes de ir a llevarla a su destino. Estando en el domicilio del sujeto, la golpeó, dejándola inconsciente.
Despertó atada con una cuerda al cuello mientras el agresor intentaba asfixiarla y continuar con los ataques. Al ver que la mujer oponía resistencia, el agresor decidió encadenarla del cuello y maniatarla.
Sin embargo, ella logró escapar a través de una ventana cuando el sujeto descuidó su vigilancia y se refugió con familiares, quienes la trasladaron rápidamente al hospital.
La Unidad de Familia y Mujer de la policía asumió el caso, identificando al agresor y logrando su detención tras las declaraciones de la víctima y varios testigos.
A pesar de una inicial decisión judicial de otorgarle libertad provisional con ciertas condiciones, otro juzgado finalmente ordenó su ingreso en prisión tras el testimonio detallado de la mujer, acusándolo de secuestro.
Sujeto ya había secuestrado y abusado de una niña en 2015
El hombre de 57 años que enfrenta acusaciones por detención ilegal y lesiones graves a una mujer, en Miranda de Ebro (Burgos), ha repetido un patrón alarmante tras un arresto previo en 2015 por un delito similar. En aquel entonces, el individuo había sido condenado por detención ilegal y abuso sexual contra una menor de 9 años, cumpliendo una condena de seis años, como confirman fuentes policiales.
Después de apenas dos años en libertad, este individuo ha sido arrestado nuevamente. En el caso anterior, vinculado a problemas familiares, según lo investigado, el hombre contó con la colaboración de otra mujer para atraer a la niña con juguetes. Una vez dentro de la vivienda, la sometió a un horrendo cautiverio, atándola y sometiéndola a actos de contenido sexual.
Tras su liberación de la condena previa, este individuo, identificado como J. M. G., ha sido detenido nuevamente por presuntamente encadenar y agredir a una mujer de mediana edad. Estos detalles revelan un historial preocupante y una conducta extremadamente peligrosa que ha llevado a nuevas acusaciones graves contra él en Miranda de Ebro.