Israel bombardea Beirut y mata a altos mandos de Hezbollah

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Foto: @MundoEConflicto

En un nuevo ataque aéreo, Israel bombardeó un suburbio de Beirut, apuntando a altos mandos de Hezbollah. El ataque, dejó al menos seis muertos y 91 heridos.

El conflicto entre Israel y Hezbollah ha escalado de manera significativa tras un ataque aéreo de la Fuerza Aérea israelí en Beirut, que se llevó a cabo la noche del viernes.

Aviones israelíes bombardearon un suburbio de la capital libanesa, dirigido específicamente contra lo que describen como depósitos de armas y misiles del grupo Hezbollah.

Según el comunicado del Ejército israelí, el ataque resultó en la muerte de altos mandos del grupo chií, entre ellos Muhammad Ali Ismail, comandante de la unidad de misiles de Hezbollah en el sur del Líbano, y su adjunto, Hossein Ahmed Ismail.

Ambos comandantes eran considerados responsables de varios actos de terrorismo, incluidos lanzamientos de cohetes hacia Israel y un ataque con un misil tierra-tierra ocurrido el miércoles pasado.

El comunicado castrense añadió que otros "comandantes y terroristas" de Hezbollah también fueron eliminados en la ofensiva. Este bombardeo es parte de la estrategia israelí de debilitar las "capacidades estratégicas" del grupo, como señaló Daniel Hagari, portavoz del Ejército de Israel, pocas horas antes del ataque.

Cabe señalar que la acción militar israelí tuvo lugar en el suburbio de Dahye, un bastión clave de Hezbollah en el sur de Beirut. Hagari confirmó que las autoridades israelíes se comunicaron con los residentes de tres edificios antes del ataque, advirtiéndoles que evacuaran sus viviendas.

Según Israel, debajo de estos inmuebles Hezbollah almacenaba misiles tierra-mar, los cuales representaban una amenaza directa al transporte marítimo internacional en la región.

Además del bombardeo en Beirut, Israel lanzó una ofensiva en la zona de Tiro, en el sur del Líbano, como parte de su campaña militar contra Hezbollah.

En respuesta, el grupo chií lanzó aproximadamente 65 cohetes hacia el norte de Israel. En una primera ola de ataques, 30 cohetes fueron dirigidos a la ciudad de Safed, en su mayoría interceptados por el sistema de defensa israelí, aunque algunos impactaron en una casa vacía y un vehículo.

Posteriormente, otros 30 cohetes fueron lanzados en la Baja Galilea, seguidos de cinco más hacia la Galilea Occidental. Estos últimos también fueron interceptados en su mayoría, con algunos impactando en áreas despobladas.

Las consecuencias del ataque israelí en Beirut fueron devastadoras, con enormes columnas de humo visible desde varios puntos de la capital libanesa.

Por su parte, el Ministerio de Salud del Líbano reportó que la ofensiva israelí dejó un saldo de seis muertos y al menos 91 heridos.

Fuentes de seguridad israelíes filtraron a la prensa local que el objetivo principal del ataque era asesinar a Hasán Nasrala, el líder de Hezbollah, sin embargo su paradero y estado de salud aún son inciertos, aumentando las especulaciones sobre si el ataque cumplió su propósito o si Nasrala logró eludir la ofensiva.


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