Indignación de católicos austriacos por decisiones papales

Las críticas de los católicos austriacos al Vaticano arrecian y un arzobispo llegó a afirmar que Roma podría convertir la Iglesia en una 'secta', tras las decisiones del papa Benedicto XVI de perdonar a integristas excomulgados y de promover a un ultraconservador en Linz (norte)

"¿Hará falta sanear a la Iglesia Católica hasta convertirla en una secta en la que sólo permanecerían unos pocos fieles, adeptos a la línea oficial?", se preguntó el arzobispo de Salzburgo, Alois Kothgasser, en una declaración divulgada el miércoles.Por otra parte, 31 de los 35 eclesiásticos presentes en una conferencia de decanos de la diócesis de Linz rechazaron la designación por el papa del ultraconservador Gerhard Maria Wagner como obispo auxiliar, informa el diario Kurier.Wagner no figuraba en la lista propuesta por el obispo de esa diócesis. El religioso impugnado, de 54 años, se dio a conocer en los últimos años con declaraciones en las que afirmaba que el tsunami que Asia sufrió en 2005 y el huracán Katrina de Nueva Orleans (EEUU) el mismo año fueron castigos divinos."En nombre de la credibilidad de la Iglesia y de la unidad de la diócesis, este nombramiento no puede ser aprobado", dijeron los decanos citados por Kurier.Es poco habitual que el clero austriaco, tradicionalmente legitimista, emita críticas contra las decisiones del Vaticano.Pero las controvertidas decisiones de Benedicto XVI generaron incomprensión incluso en los medios conservadores católicos y aceleraron la hemorragia de practicantes, en especial en la diócesis de Linz, donde en los últimos días se triplicó la cantidad de católicos que pidieron se borrados de la lista de creyentes.El Papa levantó este mes la excomunión de cuatro obispos integristas, entre ellos el británico Richard Wiliamson, que niega el Holocausto nazi.


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