En la ciudad de Kumamoto, Japón, se provocó una explosión alrededor de las 00:00 desencadenada por un hombre que intentaba deshacerse de una cucaracha, según informes de medios locales.
El incidente ocurrió cuando el individuo, de 54 años y residente en el distrito Chuo, decidió utilizar grandes cantidades de insecticida para eliminar al insecto no deseado.
La explosión resultante causó daños a una ventana del balcón y dejó al hombre con heridas leves.
La Estación de Policía de Kumamoto Higashi reportó que aproximadamente un minuto después de rociar el insecticida, se desató la explosión.
Durante la investigación, se identificaron marcas de quemaduras cerca de una mesa de calefacción "kotatsu".
Según el diario The Mainichi, el Centro Nacional de Asuntos del Consumidor de Japón ha recibido informes previos de explosiones relacionadas con insecticidas que al parecer se encendieron al entrar en contacto con enchufes eléctricos u otras fuentes de calor.