El atroz crimen que cometió un padre contra sus tres pequeños hijos está conmocionando no solo a la sociedad en Estados Unidos donde ocurrieron los hechos, sino alrededor del mundo.
Fue el jueves 15 de junio cuando una llamada al número de emergencia 911 alertó a las autoridades, una mujer gritaba que "le habían disparado a sus bebés", además la llamada de un automovilista mencionó haber visto a una niña corriendo por la calle diciendo que su padre estaba matando gente.
A la llegada de los oficiales de Policía al domicilio en Monroe Township, Ohio, encontraron al sospechoso sentado en una entrada de la casa y sin oponer resistencia fue detenido.
El padre fue identificado como Chad Doerman, de 32 años de edad, quien colocó a sus hijos de 3, 4 y 7 años de edad uno a lado del otro afuera de la casa. Uno de los niños intentó escapar hacia un campo cercano, sin embargo, Doerman literalmente lo "cazó" y lo llevó de regreso a casa para matarlo.
Los agentes de Policía encontraron los cuerpos de los tres niños afuera de la casa con heridas de bala y aunque intentaron salvarles la vida, los menores murieron en el lugar.
Doerman también hirió a la madre de los niños en la casa de la familia.
Chad Doerman admitió que alineó a los niños en el patio y les disparó, además de haber planeado los homicidios. Ahora se encuentra recluido en la cárcel del condado de Clermont acusado de tres cargos de asesinato con agravantes, además se le fijó una fianza de 20 millones de dólares.
David Gast, fiscal jefe del Tribunal Municipal del condado de Clermont, calificó los homicidios como el peor crimen del que jamás había sabido.
El padre de Chad, Keith Doerman, declaró al The New York Post que desconoce los motivos que llevaron a su hijo a hacer lo que hizo, "simplemente enloqueció".