Corea del Sur lanzó este domingo el quinto y último satélite de su constelación espía militar, completando su primera red de vigilancia independiente para monitorear los movimientos estratégicos de Corea del Norte, informó el Ministerio de Defensa.
El satélite, equipado con radar de apertura sintética (SAR), despegó a bordo de un Falcon 9 de SpaceX desde Cabo Cañaveral, Florida. Cerca de 20 minutos después del lanzamiento, Seúl confirmó su puesta en órbita con éxito.
De acuerdo con la autoridad surcoreana, la operación conjunta de los cinco satélites permitirá detectar con mayor rapidez y precisión las eventuales provocaciones del régimen de Pyongyang, en un contexto de renovada tensión regional.
Con esta constelación, Seúl podrá monitorear suelo norcoreano aproximadamente cada dos horas y reducir su dependencia de imágenes estadounidenses. Los satélites funcionarán como apoyo directo para el sistema de ataque preventivo Kill Chain, utilizado para identificar señales tempranas de amenazas nucleares o de misiles.
Corea del Norte activó su propia carrera por vigilancia espacial desde 2023, cuando declaró haber puesto en órbita su primer satélite militar. Aunque anunció que lanzaría tres satélites más en 2024, no ha logrado nuevos despliegues tras el fallido lanzamiento del año pasado, cuando un cohete explotó poco después de despegar.