Miles de visitantes en el museo de Yves Saint Laurent antes de la subasta

Miles de amantes del arte, coleccionistas y anticuarios del mundo entero madrugaron en París este sábado para admirar las obras del efímero museo del rey de la moda, Yves Saint Laurent, y de su amante Pierre Bergé, que será desmantelado el lunes cuando comience 'la subasta del siglo'

Un imponente minotauro muy viril en mármol acogía en el Grand Palais a los visitantes que desde las seis de la mañana comenzaron a hacer cola para entrar a ver esta excepcional colección de arte, reunida durante más de cuatro décadas por Saint Laurent, fallecido en junio de 2008, y por su amante y empresario."Esta exposición es la celebración del gusto de esta pareja de hombres singulares que durante cuarenta años o más compartieron su gran pasión por el arte", declaró François de Ricqles, alto ejecutivo francés de la casa de subastas Christies.Entre las 733 obras de arte acumuladas por Saint Laurent y Bergé, que serán subastadas durante tres días a partir del lunes, figura un cuadro de Picasso, "Instrumentos de música sobre un velador", de la época cubista, evaluado en treinta millones de euros (38 millones de dólares)."Este cuadro estaba valorado antes de la crisis en unos 40 millones de euros. Lo hemos rebajado. Pensamos que esta subasta va a establecer un nuevo récord mundial en lo que concierne al fruto de las ventas, superior al récord de 200 millones de dólares alcanzado hace unos años en Nueva York", dijo Ricqles.El ejecutivo de la casa internacional de subastas no ocultó sin embargo que esta gran subasta, que ha atraído sobre todo a millonarios coleccionistas de Estados Unidos, Japón, Rusia y la propia Francia, "será una prueba para ver el estado de ánimo del mercado internacional del arte"."La instalación de las obras se hizo en estrecha colaboración con Pierre Bergé. Intentamos recrear hasta donde pudimos los interiores, el ambiente de las residencias en las que se encontraban estos objetos", precisó.Con el correr de los años y el aumento de su fortuna Saint Laurent y Bergé adquirieron apartamentos y residencias en varios países, no sólo en Francia, sino también en Marruecos e Italia que decoraron con decenas de cuadros, entre ellos Matisse, Goya, Degas, Ensor, Gaugin, Mondrian, Leger y Munch.También adquirieron decenas de esculturas griegas y romanas antiguas en mármol, así como estatuillas en bronce y orfebrería, miniaturas y muebles estilo art deco.En el Grand Palais podían apreciarse las dos obras que Bergé donó al Museo del Louvre y al de Orsay, respectivamente un cuadro pintado por Goya ("Retrato de Luis María Cistue y Martínez, de 1791) y un gobelino, "La adoración de los magos", de sir Edward Coley Burne-Jones. Una escultura en madera del rumano Constantino Brancusi, estimada entre 15 y 20 millones de euros, es otra de las más significativas de la colección."Pierre Bergé conocía muy bien la historia del arte y el mundo de los museos y las galerías antes de vivir con Yves Saint Laurent, a quien le enseñó muchas cosas y le sirvió de guía en la formación del gusto", declaró por su parte Alain Tarika, conocido "marchand" de arte parisino que trabajó con ellos.Llamaban mucho la atención, no sólo por su acabado, una cabeza de rata y otra de conejo en bronce, procedentes de la fuente zodiacal del Palacio de verano del emperador Quianlong (1735-1795), al noroeste de Pekín, saqueado en 1860 por soldados franceses y británicos.El gobierno chino ha intentado bloquear su venta. Un juzgado parisino deberá definir el lunes la situación legal de estos objetos antes de su subasta, programada para el miércoles.


Comentarios

copyright de contenido INFO7