Lleva Yahir alegría y aliento a niños de hospital infantil capitalino

Luego de una breve visita a uno de los pabellones del nosocomio, donde el sonorense convivió con algunos de los pequeños que llevan a cabo su rehabilitación a los que leyó algunos cuentos, el cantante bajó al auditorio para deleitar a otros 150 chiquillos que ansiosos lo esperaban mientras disfrutaban de las gracejadas de un payaso. Sentados frente a un templado en donde el cantautor ofrecería un breve espectáculo, los pequeños que reciben atención en ocho especialidades, entre ellas, oncología, nefrología, neurología, dermatología, cardiología y psiquiatría, entre otras, gozaban con los juegos organizados por los voluntarios, y las encargadas de brindar atención a los niños. Luego de casi 30 minutos, Yahir llegó al lugar para interpretar algunos temas, como "No te apartes de mí", un "cover" de uno de los éxitos de Roberto Carlos, luego una canción que formó parte de una telenovela en la que participó, así como el tercer sencillo de su reciente disco. De forma inicial, se había establecido que Yahir cantara tres canciones, pero los pequeños entusiasmados y secundados por algunas voluntarias, a gritos le solicitaron una más. "Quiero decirles que estoy encantado de estar aquí conviviendo con ustedes. Yo también ando enfermito, el clima me ha tratado mal", le dijo a su audiencia infantil por la ronquera que mostró. "Quiero que disfruten sus regalos, que gocen sus alimentos que les tiene preparados y que les gusten sus regalos", comentó el sonorense que fue la atracción principal en la preposada organizada por Fundación CIE y una institución bancaria. Al concluir su actuación, y antes de acompañarlos a romper un par de piñatas. Yahir externó sus comentarios con los medios de comunicación que se dieron cita hoy en el hospital infantil en la colonia de los Doctores. "Como todos ustedes saben yo tengo un chamaco (Tristán), que tiene salud, una familia que lo quiere y adora; sin embargo, considero que todas las familias deberíamos tomar en cuenta eso y no estar peleando todo el tiempo en lugar de disfrutarnos mutuamente", afirmó el actor y cantante. "Debemos hacer conciencia de que hay gente que la pasa difícil, en verdad, vean a estos niños que luchan por su vida, por recuperar la salud, y a pesar de sus enfermedades con su sonrisa nos alegran la vida", comentó el norteño. Contó que minutos antes de estar en el auditorio, en la convivencia con aquellos pequeños que en verdad sufren, a la hora de contarle un cuento a una niña de tres años, en el que el protagonista era un león y que él simulaba rugir con fuerza, la inocencia de pequeña le hacía creer que en verdad la fiera estaba a su lado. Dijo que luego llegó Santa Claus a ese pabellón y la niña no se le despegaba para nada al característico personaje, "fue algo muy emotivo y padre, al mismo tiempo", añadió. "Yo soy de valores, me encanta estar al lado de la familia, pero también me agradan los chamacos de toda la vida, mucho antes de convertirme en padre", expresó. Reveló que cuando se estaba tomando una foto con uno de los 10 niños seleccionados, estando a su lado le preguntó: "¿A poco si eres Yahir?", y le contestó que sí, y el chico le sonrió emocionado. El cantante destacó que se organizan muchos eventos altruistas y que en ellos participan figuras públicas, sobre todo, del entretenimiento, pero también de otros sectores de la sociedad mexicana, "yo insisto en que los eventos hay que difundirlos para que más gente se entere. Allá en Sonora hay también amigos que le entran a estos asuntos", señaló. "Tengo un amigo actor, Carlos Torres, que organiza El Cobijón en Guadalajara, y hay muchas formas de ayudar a la gente. Yo he estado en algunos, incluso, les comento que mi mamá trabaja en un hospital y organizamos actos como éste", aseguró. Yahir añadió que, entre los que él y su familia han organizado directamente, destaca uno en el que solicitaron cobijas, alimentos y juguetes. "La última vez que lo hicimos recaudamos como tres toneladas de ayuda, gracias al apoyo de una estación de radio. Lo hicimos en casa de mis abuelos y ya no cabía una prenda más, y seguiremos haciéndolo para dar un poco de lo que muchos no tienen", dijo. Al final, los pequeños se formaron para participar en juegos como el futbolito, las canicas y tiro de dardos, entre otros, además, disfrutaron de aguas de horchata, tamarindo, jamaica y frutas picadas en vaso, además de un regalo.

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