A medida que se aproxima el Día de Muertos, los vendedores de flores ya se instalan a las afueras de los campossntos tal es el caso del panteón Santo Cristo, en Saltillo, Coahuila, esperando la llegada de clientes.
Muchos de ellos migraron hace algunos años desde el panteón Valdés Sánchez en busca de mejores condiciones, como mayor seguridad y espacios más amplios.
Actualmente, los precios son accesibles, aunque se anticipa un aumento una vez que llegue la flor proveniente de la Ciudad de México.
Pese a la cercanía de la fecha, el movimiento en este camposanto privado aún es bajo.
Algunos visitantes optan por acudir días antes del 2 de noviembre para evitar las aglomeraciones, ya que durante el mediodía del Día de Muertos el lugar suele estar entre los más concurridos de la ciudad.
Los comerciantes confían en que las ventas mejoren conforme se acerque la festividad, una de las más importantes para quienes rinden homenaje a sus seres queridos fallecidos.
Mientras tanto, afinan los últimos detalles para ofrecer flores frescas y variedad a quienes acudan a decorar las tumbas en esta tradicional conmemoración.