Renuncia directora del Hospital del ISSSTE en Coahuila

En medio de una serie de acusaciones penales y administrativas, por las cuales incluso ha sido citada a declarar por las autoridades judiciales del estado y la federación, la doctora Hilda Luna renunció esta semana a la dirección del Hospital del ISSSTE en Coahuila. 

La ahora exdirectora ha sido citada en diversas ocasiones por la Fiscalía General de Coahuila y la Fiscalia General de la República para declarar sobre denuncias que incluyen malos manejos administrativos, negligencias médica y una gestión irregular de los servicios hospitalarios.

Una de las acusaciones más graves contra su administración es el caso de Sofía Magdalena Ortega Castillo, una enfermera que falleció tras ser desatendida en sus necesidades médicas. 

A Sofía se le negó acceso a medicamentos y a los trámites para su invalidez, lo que contribuyó a su muerte por broncoaspiración y convulsiones. 

Esta tragedia se suma a otras denuncias, como la falta de medidas para proteger a una trabajadora de base de nombre Sonia “N” que denunció ser víctima de acoso sexual en el hospital por parte de un trabajador administrativo. 

A pesar de la orden de la Procuraduría para brindarle protección, la administración de Luna no tomó las medidas necesarias, lo que ha contribuido a un ambiente de impunidad dentro de la institución de acuerdo a las fuentes consultadas. 

Además, la exdirectora enfrenta investigaciones por la autorización de una donación irregular de medicamentos controlados y oncológicos, lo que vulneró los protocolos de seguridad y comprometió la salud de los pacientes. 

Por lo anterior las autoridades federales encargadas del caso han solicitado su declaración como parte de una investigación que busca esclarecer estos hechos.

En el ámbito administrativo, se identificaronirregularidades importantes en la gestión de los servicios subrogados del hospital, donde los servicios de esenciales como el laboratorio, la anestesia y la hemodinamia fueron subrogados a proveedores externos, lo que dio lugar a denuncias por malas prácticas y desvíos de recursos. 

La crisis institucional no solo ha afectado la gestión administrativa y financiera, sino también las condiciones físicas del hospital de Saltillo, donde se han  reportado incidentes graves, como la fuga de materia fecal en el laboratorio debido a la rotura de tuberías, lo que refleja el mal estado de las instalaciones. 

Además, el segundo piso del hospital, que debería estar destinado a atención médica, se ha convertido en una bodega, lo que evidencia la falta de mantenimiento y una deficiente planificación en el uso de recursos.

Otro de los puntos críticos ha sido la falta de asignación de bases para médicos y especialistas en áreas clave como psiquiatría y gastroenterología, lo que ha dejado a numerosos pacientes sin la atención adecuada. 

Las bases han sido retrasadas intencionalmente, luego de que la administración de Luna y su subdirectora, Rosana Flores Moreno, priorizaron otros intereses en lugar de atender las necesidades urgentes de los derechohabientes, señalaron las fuentes del ISSSTE en Coahuila.

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