Tras las fuertes lluvias registradas en los primeros días de julio, autoridades municipales y estatales, en coordinación con el Ejército Mexicano, iniciaron trabajos de limpieza, rehabilitación de daños y atención directa a la ciudadanía en diversos sectores afectados de la ciudad.
El alcalde Javier Díaz González informó que tan solo en los primeros seis días del mes cayó el equivalente a toda la lluvia acumulada durante el primer semestre del año.
A pesar de ello, destacó que se mantiene un saldo blanco, aunque se contabilizaron 18 vehículos varados, 8 bardas colapsadas, 10 árboles caídos, 13 viviendas inundadas, un incendio en casa habitación y tres fugas de gas.
“Gracias al trabajo conjunto con Protección Civil del Estado y elementos del Ejército, logramos rescatar a 25 personas y evitar tragedias mayores”, expresó el edil.
“La prioridad sigue siendo salvaguardar la vida y seguridad de las familias”.
Una de las personas rescatadas fue la señora María Teresa Jiménez, habitante de la colonia Mirasierra, quien relató con angustia cómo el nivel del agua subió rápidamente durante la madrugada.
“No sabíamos qué hacer, el agua ya nos llegaba a las rodillas y teníamos miedo de quedarnos atrapados. Por suerte llegaron los rescatistas y nos ayudaron a salir con mis hijos”, comentó.
En puntos como el bulevar Colosio, Fundadores, Country Club, Ciudad Deportiva y Calzada Antonio Narro, cuadrillas municipales trabajan en el retiro de escombros, desazolve de drenajes y levantamiento de árboles y postes caídos.
Luis Alberto Gutiérrez, trabajador del área de Servicios Primarios, mencionó que los trabajos han sido continuos durante las últimas 48 horas.
“Estamos en la calle desde que paró la tormenta, limpiando rejillas, ayudando a vecinos y asegurando zonas donde hubo deslaves menores. Ha sido muy intenso, pero es parte de nuestra labor”.