Alan: un migrante que busca despedirse de su madre

La migración es un camino lleno de sacrificios y esperanza, una decisión que muchos toman ante la inseguridad, la falta de empleo y la necesidad de un mejor futuro.

Tal es la historia de Alan Bladimir, un joven originario de Nicaragua que, hace tres años, dejó su país en busca de una vida más digna.

Alan llegó a México huyendo de la violencia y la opresión de derechos en su nación. Con esfuerzo, logró establecerse en Saltillo, donde encontró trabajo como mesero y rentó una vivienda en la calle Xicoténcatl, en la zona centro de la ciudad. Sin embargo, a pesar de sus logros, la vida le tenía preparada una dura prueba.

Hace unos meses, Alan recibió la noticia que más temía: su madre había fallecido a causa del cáncer. La distancia y la falta de recursos económicos le impidieron estar a su lado en sus últimos momentos, un dolor que lleva en el alma. Ahora, su único anhelo es viajar a Nicaragua para despedirse de ella y visitar su tumba, pero su situación económica no le permite costear el viaje.

Con humildad y esperanza, Alan hace un llamado a la solidaridad de los ciudadanos que deseen ayudarlo a cumplir este último adiós. Quienes quieran brindarle apoyo pueden comunicarse con él al número de contacto proporcionado.

Su historia refleja el sacrificio de miles de migrantes que, en la búsqueda de una vida mejor, enfrentan la tristeza de la separación familiar y la añoranza de su tierra.

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