Avanza en Venezuela reelección ilimitada

El Parlamento, controlado ampliamente por seguidores del presidente Chávez, inició el martes la tercera y última discusión de la reforma, que opositores al gobernante venezolano dicen busca perpetuarlo en el poder al eliminar los límites a la reelección presidencial. Sin embargo, Chávez asegura que la reforma constitucional que él mismo propuso cuando llegó al poder busca construir un modelo socialista en la nación petrolera al estilo venezolano, distinto al cubano. Los diputados del disidente partido Podemos, tras desavenencias con el presidente Chávez, no votaron a favor cuando fue sometido para su aprobación (cerca de la media noche del viernes) el polémico artículo. El mandatario presentó en agosto un proyecto de reforma de 33 artículos, pero una comisión parlamentaria decidió elevar la propuesta a 58 artículos para iniciar la tercera discusión del proyecto. Entre los artículos más polémicos que agregaron a la propuesta presidencial y que aún no han sido aprobados, figuran los que se refieren a los estados de excepción que eliminan el límite de tiempo y suprimen los derechos al debido proceso y a la información, aunque el viernes el Parlamento decidió sumar más que elevaría la reforma a unos 61 artículos. El proyecto, que será sancionado en pocos días por el Parlamento, se espera sea sometido a un referendo en diciembre. Según medios de prensa, el partido opositor y de derecha Primero Justicia reunió a unas pocas decenas de activistas en una de las entradas viales a Caracas en rechazo a las reformas. Paralelamente, grupos de universitarios opositores al gobierno anunciaron que el próximo martes marcharán en Caracas en repudio a las reformas y reiteraron que no la suspenderán aunque acudan sólo mil 500 personas, y criticaron a los partidos antichavistas por no organizar acciones similares. “Vulneran soberanía” Por otra parte, la Asamblea Nacional pedirá al presidente Hugo Chávez que declare a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) organización non grata en el país, por emitir en su reciente reunión un informe en el que califica al gobierno venezolano de “dictatorial”, señaló una diputada. La legisladora Desirée Santos, quien fue reportera antes de su carrera en el Congreso, informó que la medida sería en respuesta a la intención de la SIP de realizar en Caracas en marzo de 2008 una de sus reuniones. Dijo que los legisladores exhortarán al gobierno a que declare “no grata la presencia de la SIP, porque vienen a vulnerar la soberanía y el suelo sagrado de esta patria”. La SIP ha ofendido reiteradamente al pueblo y al gobierno venezolanos, por lo que “no debe venir a nuestro país, pues si esa organización considera que en este país hay una dictadura, un régimen que atenta contra los derechos humanos y la libertad de expresión, que no venga a Venezuela”, sostuvo la legisladora Desirée Santos.

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